“No vine por un evento, vine para construir una carrera en el rally”. Así de claro y tajante es Adolfo Almarza (37 años), gran exponente por largas temporadas del downhill y paraciclismo, quien está ad portas de hacer su debut en el Copec RallyMobil disputando el Motorshow de Parque Motor Laguna Carén.
Embajador de Toyota Chile, este destacado exponente de los deportes con ruedas y quien ha mostrado una determinación sin igual por doblarle la mano al destino, el mismo que lo llevó a ser víctima de un accidente y perder sus piernas cuando solo tenía 12 años de edad, se encuentra con el corazón lleno y la motivación a tope pensando en su nuevo desafío enfocado en el automovilismo, un capítulo que aguarda con ansias y con la convicción que le permitirá cruzar nuevas fronteras.

Adolfo, toda una vida ligada al deporte. ¿Qué implica en tu carrera iniciar este nuevo capítulo en el rally?
“Es volver a esa sensación que me ha acompañado toda la vida: desafiar lo imposible. Perdí mis piernas a los 12 años, aprendí a caminar con prótesis, volé en el downhill y competí en paraciclismo a nivel mundial. Hoy el rally es la evolución natural de mi historia: seguir avanzando, seguir decidiendo y demostrar que los límites se pueden manejar, no evitar”.

– ¿Cuán sorpresiva fue la posibilidad de sumarte al Motorshow?
“Totalmente. Con mi equipo estábamos armando el proyecto y en conversaciones con Toyota Chile y don Ignacio Funes, y al par de meses nos reunimos con Don Felipe Horta. Al día siguiente nos invitó al podcast que le estaba realizando a Don Ignacio Funes y juntos me dieron la sorpresa y la bienvenida al RallyMobil en esta misma instancia. Esa fue la forma de enterarme en que estamos adentro: tenemos auto y el proyecto dejó de ser un sueño para convertirse en realidad.
Cuando me dieron la noticia se me cayeron las lágrimas. Imagínate: uno de los proyectos más lindos de mi vida empezando de verdad. esto me llena de energía, de compromiso y de ganas de seguir aprendiendo y creciendo. Hoy empezamos algo grande, y eso me emociona profundamente.”
– Por largos años has estado habituado a desafiar las normas. ¿Cómo ves el desafío de correr a fondo en un auto de rally?
“Como siempre, es decir con respeto, humildad y hambre. El downhill me enseñó a caer de verdad y volver a levantarme. El rally es igual. Requiere de precisión, riesgo y aguante mental. Estoy acostumbrado a tomar decisiones al borde. Y acá voy a hacerlo otra vez, pero con cuatro ruedas y mucho más maduro”.

Desde 2005 Alex Zanardi, quien quedó parapléjico en 2001, se lució corriendo autos de Súper y Gran Turismo, tal como lo ha hecho el propio Nano Demaria en el rally cross country nacional. Técnicamente hablando, ¿qué nos puedes comentar sobre la forma en que manejarás un vehículo de rally?
“Hoy en día mi discapacidad me permite manejar sin adaptaciones y con entrenamiento serio. Mis prótesis no son un límite, son mis herramientas. Trabajo con técnicos de alto nivel, que me permiten ser competitivo. No manejo desde la discapacidad, manejo desde la capacidad”.
– Has llevado una vida a toda velocidad. Dentro de tu pasión por los deportes adrenalínicos, ¿qué lugar ha ocupado el motorsport?
“Siempre estuvo ahí. Desde niño soñaba con autos, pero primero tuve que ganar mis propias carreras: volver a caminar, reinventarme y aprender a volar en bici. Hoy el motorsport llega en el mejor momento de mi vida: con madurez, foco y una historia que me preparó para este volante”.

– Los ciclistas tienen una sensibilidad muy especial. ¿Crees que ese aspecto es uno de los pilares que te puede llevar alto en el automovilismo?
“Totalmente. La bicicleta de montaña y los grandes desafíos del downhill profesional en el mundo me enseñó a sentir y leer el terreno, a anticipar, a reaccionar en milésimas, a convivir con el dolor y con la presión. Esas habilidades se trasladan directo al auto. Los años de downhill y el alto rendimiento me dieron un tacto que no se aprende en una sala, se aprende en terreno, en el cerro, en la vida real”.
– Llevas un tiempo cumpliendo el rol de embajador de Toyota, referente absoluto en el rally mundial. ¿Cuánto te motiva esta alianza pensando en la posibilidad de manejar más adelante un auto de esa marca en el RallyMobil tal como lo haces en la vida diaria?
“Para mí Toyota es más que una marca, una familia, ya que llevamos una relación de años, de confianza, de camino recorrido y de mejora continua como lo aprendí de ellos. Los valores que he rescatado de esta marca número 1 en el mundo me llevo a soñar con lo que estamos realizando hoy en día. Pensar en manejar un Toyota en el RallyMobil es una motivación enorme, es comenzar a construir el sueño más grande que he tenido en el área deportiva”.

– ¿Qué clases de mensajes has recibido de la familia del rally chileno tras el anuncio de tu llegada al Copec RallyMobil?
“Recibí cariño, respeto y sorpresa. Muchos me dijeron: ‘Bienvenido, este es tu lugar’. Otros se ofrecieron a ayudar, a dar consejos y a abrir puertas. Sentí que el rally chileno me recibió como uno más. Y eso, para alguien que viene de otra disciplina, es enorme”.
– ¿Qué esperas del Motorshow y del futuro en el rally?
“Estuve de público hace unos años en el Motorshow ahora estaremos adentro con todas las ganas y voluntad de aprender, disfrutar y demostrar que estoy acá para competir de verdad. Del futuro espero crecimiento, profesionalismo y constancia. No vine por un evento, vine para construir una carrera en el rally”.

– Por último, ¿qué mensaje puedes compartir con todos aquellos que por distintos motivos han sufrido alguna discapacidad física y que siguen soñando con hacer historia en el deporte?
“Que no esperen a que exista un camino: que lo creen y busquen las oportunidades. Yo volé y realicé downhill profesional cuando nadie lo había hecho con prótesis y en la actualidad sigo siendo en único en el mundo; además decidí competir un par de años en paraciclismo mundial cuando esa rama ni existía en Chile, junto a mi equipo la iniciamos y hoy son más de 50 paraciclistas activos en el país que representan a Chile.
El cuerpo puede cambiar, la vida puede golpearte… pero la decisión siempre es tuya. Para un comino difícil, una persona sin límites. Si no tiene solución, tiene adaptación. Y si tiene adaptación, tiene futuro”.

