El Citroën DS3 en su configuración R3 se mantuvo fiel al parque automotor del campeonato Copec RallyMobil por varios años, particularmente desde que la categoría optó por seguir en todas sus clases el rumbo emprendido por la FIA (Federación Internacional de Automovilismo) en cuanto a los modelos homologados para este tipo de competencias.

Sin mayor carga aerodinámica, brioso y con una dosis de potencia no tan fácil de manejar para un auto de tracción delantera (motor 1.6 turbo con más de 230 caballos de fuerza y caja secuencial de sexta al volante), durante largo tiempo puso a prueba las habilidades de muchos participantes en Chile, tal como lo sigue haciendo.

La temporada recientemente concluida demostró que el producto francés no ha perdido vigencia del todo, incluso frente a máquinas de concepción más moderna, como los Rally4.

En manos de un piloto con la capacidad propia de Tadeo Rosselot, este Citroën se fue acercando cada vez más a la punta del grupo de vehículos con dos ruedas motrices hasta que no solo ganó tramos, sino que primero se metió más de una vez en podios de la división RC4 y hasta llegó a imponerse a todos en el exigente y veloz Rally de Osorno, siempre con el viñamarino a sus mandos, navegado por Sebastián Olguín. Juntos, se consagraron campeones R3 y terminaron terceros en RC4.

Surgido en 2010, en la escena nacional el DS3 Max poco a poco se va abriendo paso ante otros ejemplares más nuevos y encontrando un lugar, como por ejemplos algunos campeonatos regionales, donde seguir ejerciendo su rendimiento por varios años más.

Fotos: Luis Barra/Cristian Lagos