Energía recargada y una muy bien ejecutada estrategia, parecen haber sido las claves para que el Joker Rally Team se adjudicara la segunda presentación anual del campeonato Copec RallyMobil.
Si bien en 2021, la carrera se centró en Rinconada, a muy corta distancia, el itinerario fue muy similar al de esta vez. Ciertamente, las condiciones en general podrían definirse como idénticas.
Aquella vez, en agosto pasado, la escuadra del arlequín participaba por segunda vez con el modelo C3 de Citroën en la clase mayor. Pedro Heller se había evidenciado muy a gusto con el producto francés meses antes en la Copa Mobil 1 en Laguna Carén y en su siguiente aparición con el auto, en estos tramos que suben y bajan de modo marcado los Andes lo condujo al triunfo.
Sin embargo, comparando una edición con otra, hubo dos diferencias importantes. Una es que en esta ocasión él y su navegante Pablo Olmos fueron líderes generales durante toda la prueba. En su planteo, no necesitar arrasar con parciales ganados. De hecho, quizás hasta ese mismo haya sido el motivo por el que prevalecieron.
La constancia de Pedro le permitió librarse de los múltiples pinchazos de los cuales casi todos fueron víctima y del castigo que acusaban los neumáticos. Paradójicamente, la rueda delantera izquierda que llegó desinflada a la meta en El Chacay fue una que les causó un susto de proporciones, además de dejarlos ganar de milagro.
En un final de novela y a una diferencia sin precedentes de cinco décimas, Alberto Heller y Luis Allende se ocuparon de hacer que Joker se lleve de la Región de Valparaíso un fantástico 1-2, dominio que no ostentaban desde 2018. Increíblemente, ellos mismos, pero en orden invertido, habían quedado a dos décimas en Río Bueno 2018 con los Ford Fiesta R5 en el que fue el margen más apretado de la historia de la categoría.
Aunque el plan de Alberto fue parecido al de su hermano, el menor de ellos se manifestó muy veloz y, a diferencia de su compañero, sí se impuso en un par de pruebas, concretamente en la 3 y en la 5 durante el primer día.
El nivel del equipo se aprecia en alza y hasta el nuevo diseño de sus máquinas, con líneas peculiares muy bien logradas y peculiares tonos de verde gozaron de la aceptación del público y, a juzgar por este resultado, hasta de la diosa Fortuna.
Representando al grupo que coordina, Felipe Espinoza analizó: “No podríamos pedir más con lo vivido en Calle Larga como equipo. En el Rally del Biobío estuvimos un poco alicaídos, pero esto nos revitaliza enormemente. Cuando en 2020 se canceló el torneo nacional por la pandemia de coronavirus, en Joker veníamos de tres temporadas muy intensas, corriendo en Chile y en citas mundiales también. Habíamos sido los primeros en traer un auto R5 a esta tierra y tuvimos que descubrir en ese período al Peugeot y al Ford. Aprendimos mucho y obtuvimos varios logros recordados. Fueron tiempos positivos que de golpe pasaron una merma brusca de adrenalina. 2021 nos siguió complicando la logística, los viajes de los navegantes, la importación de repuestos, etc. Hace mes, en Concepción no empezamos como queríamos y tampoco tuvimos un ingeniero que nos asista en persona. Detectamos allí una falla en los amortiguadores que detectamos en un ensayo. Tras la primera fecha, nos reunimos entre todos y reformulamos algunos aspectos de trabajo y ahora vemos que todo eso ha sido muy positivo. No descarto que, además de una táctica apropiada, también tuvimos una cuota de suerte. Lo relevante es que la labor de Pedro manteniéndose frío en la punta y la remontada de ‘Beto’ en la segunda etapa en condiciones así de difíciles han sido dignos de las felicitaciones recibidas”.