Sébastien Loeb e Isabelle Galmiche arrebataron el liderato del Rally de Acrópolis a su compañero de equipo Pierre-Louis Loubet a última hora de la tarde al cabo de la primera etapa del clásico griego puntuable por el Campeonato del Mundo de la especialidad.
Los Ford Puma híbridos de M-Sport encabezaron un óptimo 1-2 en los duros y pedregosos caminos de tierra alrededor de Lamia después de la partida del evento ayer (jueves) con un superespecial asfalto corto en Atenas.
El chileno Jorge Martínez y el argentino Alberto Álvarez tuvieron un muy ben comienzo al ubicarse en la undécima posición de la clase WRC2 con un Škoda Fabia Rally2 Evo.
En su cuarta aparición en lo que va del año, Loeb empezó dominando en los relojes durante una jornada calurosa del mundo en la que al mediodía fue perdiendo terreno frente a su colega del Puma y compatriota Pierre-Louis Loubet, principalmente después de pasarse de largo en una curva cerrada en el tramo de Dafni.
A la vez que Loubet conseguía su primera victoria parcial a este nivel, el joven galo parecía capaz de llegar al parque cerrado delante de todos ya que estaba en condiciones de marcar más de un mejor tiempo con el producto inglés. No obstante, la experiencia del nueve veces monarca de la disciplina salió a relucir.
Recordando su experiencia en las rutas de Bauxites de hace diez años, Sébastien Loeb le descontó diez segundos y pasó delante de nuevo. En definitiva, nada más 1.7 segundos separaron a ambos. Vale aclarar que antes, Loubet había cedido algunos segundos a causa de problemas con la dirección asistida y los frenos.
Esapekka Lappi quedó tercero con el mejor Toyota GR Yaris, ciertamente muy cerca de ellos, a 8.7s. Thierry Neuville maneja el más eficaz de los Hyundai i20 N. El belga es cuarto a 16.0s de la punta a pesar de manifestar que su coche era subvirante y de haber lidiado con el polvo en suspensión al principio. Dos de sus colegas con la marca surcoreana, Daniel Sordo y Ott Tänak, le siguen en el clasificador, en el caso del estonio con inconvenientes en la unidad híbrida, que le hizo mermar potencia.
Mientras que Gus Greensmith con Ford y Elfyn Evans con Toyota fueron séptimo y octavo, Kalle Rovanperä (Toyota) abrió la ruta y tuvo que conformarse con el noveno puesto, precediendo a su compañero Takamoto Katsuta.
Craig Breen se detuvo a cambiar una cambiar una rueda de su Puma en la segunda pasada por Loutraki.
Emil Lindholm fue contundente en WRC2 al volante de un Fabia de Toksport en su segunda visita Grecia. El finlandés le lleva 30.5s a Nikolay Gryazin, con idéntico ejemplar. Teemu Suninen figura tercero a 36.1s a bordo de un Hyundai.
Yohan Rossel, cuarto, está bien parado hasta ahora en materia de puntos con su Citroën C3, en particular desde el percance inicial de Andreas Mikkelsen, quien en la capital del país torció la dirección de su máquina en un golpe seco.
Martínez, conduciendo un Fabia Rally2 Evo de MAPO Motorsport, viene trepando con firmeza y en constante ascenso. Arrancó siendo 20º en el Shakedown, fue cauto al inicio manteniéndose entre 13º y 17º, pero de a poco se fue soltando hasta meterse entre los diez mejores en la PE5, a 16.1s del más veloz, Lindholm (que lo aventaja por 2m55.9s), en una etapa para nada sencilla por el hecho de transitar 110 kilómetros sin asistencia mecánica.
“Ha sido un día difícil por cómo se planteaban seis pruebas especiales sin contar con asistencia, pero estamos felices por no haber castigado el auto. Lo único que pudimos hacer fue cambiar los neumáticos. Implementamos un ritmo seguro, que fuimos aumentando progresivamente hasta que el polvo de adelante nos molestó en el último sector”, contó el penquista.
En WRC3, el irlandés William Creighton pretende obtener su primera victoria. Por el momento, supera por más de un minuto al paraguayo Diego Domínguez (h). Ellos dos han sido los únicos en marcar los mejores registros desde que se largó el Acrópolis con sus Ford Fiesta Rally3.
En su primer contacto con este vehículo, es tercero el local Epameinondas Karanikolas.
Robert Virves se acercó a la obtención del cetro Junior gracias a liderar cómodamente esa división con este mismo tipo de autos. El estonio se benefició con los traspiés de Jon Armstrong por la tarde.
El británico había recortado de 15.3s a 3.0s el margen establecido por Virves, pero un inoportuno pinchazo que lo obligó a parar a cambiar un neumático arruinó su empeñosa lucha en el último compromiso de esta etapa.
A falta de una, Sami Pajari rompió dos gomas y, con una sola de repuesto, no pudo seguir su rumbo. Lauri Joona dañó la suspensión, pero aún es cuarto, detrás de Armstrong y Creighton.
Mañana, los participantes cubren casi 150 kilómetros cronometrados al oeste de Lamia, con dos pasadas por Pyrgos y Tarzán, más otros dos tramos reocrridos una vez cada uno.