Cuando los autos R5 ingresaron a Chile, Pablo Olmos fue el primer navegante campeón junto a Pedro Heller en un Ford Fiesta del equipo Joker Rally. Venían de una temporada promocional juntos, haciendo todas las fechas en un Peugeot 208 T16 que participaba como invitado, para que el público se acostumbrara a lo que sereía el futuro reglamentario del campeonato Copec RallyMobil™.

En 2021, el profesional nacido en Córdoba (Argentina) no pudo estar en Rinconada-Los Andes (quedó varado por la imposibilidad de viajar en pandemia en Paraguay, donde también ejerce su rol), pero sí regresó a la actividad este mes en Casablanca, donde consiguió un gran podio, otra vez junto a Heller, pero ahora tripulando un Citroën C3.

Estamos a mitad de camino entre lo que fue Casablanca y lo que será Quillón. Rebobinando, ¿es cierto que la segunda fecha puntuable del año fue verdaderamente difícil para el trabajo de los copilotos?

Sí. Todos los tramos fueron muy bonitos, pero exigían mucho para quien estaba en la butaca derecha. Había partes con piso resbaladizo. Derrapábamos mucho, casi todo el tiempo. Me costó recordar otra competencia en la que una curva, por el ritmo del itinerario, se viniera tan encima de la otra y nos exigiera tanta concentración y atención a las notas que íbamos cantando casi sin respiro.

¿Cómo juzgas esta nueva etapa del equipo con Citroën?

A quienes nos gusta el Rally, nos subimos a cualquier tipo de vehículo. Podrá ser un tracción simple de 100 caballos de fuerza a estos auténticos autos de carrera. Es una dicha estar arriba de un R5/Rally2 por el comportamiento de su chasis, por la velocidad de tránsito en curva, su poder de frenado, la fuerza que tienen, cómo trabajan las suspensiones y muchos otros detalles que los convierten en un fenómeno técnico.

La última edición de Quillón te tocó largar con un piloto especial, también cantante, como lo es el peruano Mario Hart…

Así es. Y como él siempre cantaba en la rampa de largada o le poía el micrófono a otros, le avisé de antemano que no lo hiciera conmigo porque me iba a salir muy mal. ¡Lo amenacé con no leerle la hoja de ruta en los tramos si me obligaba! La carrera es linda y si llueve suele ocurrir que la adherencia es incluso mejor que cuando está seca, por el tipo de piso.

¿Cómo definirías el actual momento deportivo de Pedro Heller?

Evidentemente, debe venir haciendo bien las cosas desde el momento que es el líder del campeonato. Tiene la misma mentalidad ganadora de antes, pero que ahora se suma a una cierta madurez que se aprecia al compararla con cómo encaraba los rallies hasta el mundial chileno de 2019, por citar un ejemplo. Ha sido padre, que a veces te cambia la manera de analizar una situación. A mí me pasa lo mismo y tal como está todo nos importa mucho divertirnos, aunque sin desaprovechar la posibilidad de pelear por el título, incluso cuando la práctica del deporte está para él en un segundo o tercer nivel, ya que tiene por encima sus obligaciones laborales y familiares.