Sobre la competencia

Este fin de semana, con la disputa del Rally de Croacia como tercera fecha del Campeonato del Mundo, habrá terminado un período de ocho semanas sin actividad para la categoría luego del Rally de Suecia en febrero.

Como contrapartida a ese receso, en los próximos dos meses se correrán tres pruebas en Portugal, Cerdeña y Kenia.

La carrera croata pasó al calendario mundial por primera vez el año pasado sobre un asfalto cuya adherencia suele variar de etapa a etapa, pero que generalmente complica a los pilotos.

A este pintoresco país del este europeo, Kalle Rovanperä llega como líder de la serie representando a Toyota Gazoo Racing en un evento que hace doce meses no le fue en absoluto favorable, cuando estrelló su Yaris WRC a poco de largar. Ahora, el joven finés le lleva 14 puntos a Thierry Neuville.

Elfyn Evans y Esapekka Lappi se unen a Rovanperä en los GR Yaris Rally1, con Takamoto Katsuta tripulando una cuarta unidad.

Craig Breen probó bastante en este lugar semanas atrás con un Ford Puma de M-Sport. El irlandés será acompañado por Gus Greensmith y Adrien Fourmaux, sorprendente quinto en 2021 aquí debutando con un auto de la clase superior. Pierre-Louis se subirá a uno de estos ejemplares por primera vez. En otro orden de coas, la escuadra británica confirmó ayer que Sébastien Loeb volverá en la tierra portuguesa.

Hyundai Motorsport presenta la misma alineación con la que viene participando desde Montecarlo con los i20, es decir la que componen Neuville, Oliver Solberg y Ott Tänak.

Hay 29 anotados con máquinas Rally2. Es una lista prestigiosa que incluya los Citroën C3 de Yohan Rossel, Eric Camilli, Stéphane Lefebvre y Sean Johnston, los Škoda Fabia de Kajetan Kajetanowicz, Emil Lindholm, Chris Ingram, Benito Guerra, Ricardo Triviño, Nikolay Gryazin y Armin Kremer, el Hyundai i20 de Grégoire Munster, los Volkswagen Polo GTI de Georg Linnamäe y Olivier Burri y los Ford Fiesta de Erik Cais y Jari Huttunen.

La división Junior o WRC3 se integra con siete Fiesta Rally3, los de Sami Pajari, Jon Armstrong, Lauri Joona, William Creighton, Robert Virves, McRae Kimathi y Jean-Baptiste Franceschi.

Lo que hay que saber

63 binomios, cuatro menos que la edición anterior, deberían largar la carrera con epicentro en Zagreb, la capital nacional.

El Rally de Croacia ingresó al Campeonato Europeo en 1992 y duró en él 2013. De antes que esa época es su ganador más repetido, Branislav Küzmic con los modelos 5 y 11 Turbo de Renault.

Los caminos de superficie sellada son resbaladizos incluso en seco, mientras que el pavimento ofrece partes lisas al extremo como otras muy rotas. Si añadimos las crestas y los saltos, es fácil deducir a los cambios a los que se enfrentan los equipos entre la largada de mañana (jueves 21 de abril) y el domingo.

La primera etapa va hacia las zonas altas de Samoborsko Gorje, Žumberak y la región de Karlovac y es la más larga, incluyendo un parcial de casi 21 kilómetros conocido como “Ruta de las 1.000 Curvas”.

El sábado es más parecido y transita el tramo más extenso, Kostanjevac-Petruš Vrh (23,76 km) antes de encarar la costa adriática en trepada hacia lo que en invierno es una estación de esquí.

El panorama se ensancha para la tercera etapa, de promedio y más alto. Se parte al lado de un castillo del siglo XIII junto a un lago en medio de un paisaje de ensueño para terminar con el Power Stage.

Son 20 especiales que suman 291,84 km y un recorrido total de 1.642,18 km.

En 2021, Sébastien Ogier le arrebató la victoria a su compañero de equipo, Elfyn Evans, cuando el galés se deslizó por una colina cerca del final. Con una diferencia entre ellos de seis décimas, aquella se constituyó en la tercera definición más ajustada de la historia.

El lugar

La República de Croacia es uno de los 27 estados soberanos de la Unión Europea. Se ubica en el centro-este del continente y da al Mar Adriático, limitando con Hungría, Eslovenia, Serbia y Bosnia-Herzegovina y Montenegro.

Son 4.105.000 habitantes que vienen de la etnia que arribó a este sitio en el siglo VII. Después de largas historias de condes, duques y una fusión con Hungría, tras la Segunda Guerra Mundial se convirtió en Yugoslavia hasta que, con la caída de la Cortina de Hierro, el país declaró su independencia en 1991, acto que precedió a un conflicto bélico regional de cuatro años.

Su población ingresó hace a poco entre aquellos con una economía de altos ingresos, en virtud de sus rubros más fuertes, como el turismo y los servicios que de él derivan, la industria y la agricultura.