Comentario

Aunque los títulos del Campeonato del Mundo de Rally ya están definidos (solo falta el de WRC2 Challenger), una nueva edición del Rally de Japón llega con bastante expectativa a un nuevo cierre de calendario este fin de semana (16 al 19 de noviembre).

Al igual que lo hecho en 2022, a Thierry Neuville y a Hyundai Motorsport les gustaría terminar la temporada con un éxito en el asfalto de la isla pacífica, pero ocurre que Toyota Gazoo Racing está en terreno local y quiere lo mismo con igual o más ganas. Neuville y Elfyn Evans se debaten aquí por el subcampeonato. El belga está siete puntos más arriba.

Japón regresó a la escena de esta categoría 12 meses atrás, dejando de lado la tierra para priorizar un itinerario completamente nuevo sobre pavimento, con epicentro en la ciudad de Aichi.

Para la formación dirigida por Jari-Matti Latvala, la presencia en sus filas del local Takamoto Katsuta reviste una importancia particular que influye mucho en el seguimiento del público que lo alienta. Los otros GR Yaris en Asia son para Sebastién Ogier y, lógicamente, para el recientemente coronado Kalle Rovanperä.

Acompañando a Thierry Neuville con los i20 N híbridos están en esta ocasión Daniel Sordo y Esapekka Lappi. La larca surocoreana aguarda para 2024 el retorno a sus huestes de Ott Tänak.

El estonio largará por última vez con un Ford Puma de M-Sport, secundado por Adrien Fourmaux, el francés que aquí sustituirá a su compatriota Pierre-Louis Loubet.

Se esperan más de 40.000 aficionados mañana por la tarde en el nuevo superespecial en el estadio cubierto Toyota Stadium, que dará comienzo a la carrera con dos autos partiendo al mismo tiempo.

Ya el viernes pasado hubo pilotos en el país, algunos de los cuales fueron recibidos por el Ministro de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología de la nación, Masahito Moriyama. Antes de ser invitados a cenar, ellos y algunas autoridades del gobierno nipón asistieron a un foro de neutralidad de carbono en el cual, a través de un video, Mohammed Ben Sulayem (Presidente de la Federación Internacional de Automovilismo) destacó el planteamiento respetuoso del Rally a nivel mundial con el medio ambiente, no solo con el uso de vehículos híbridos, sino también con el combustible de alto rendimiento P1, que es totalmente sintético y neutro en este sentido.

Hay solamente 35 inscritos. Entre el polaco Kajetan Kajetanowicz y el ruso Nikolay Gryazin se debate el título WRC2 Challenger. Con ese tipo de máquinas, y también con Škoda, compiten -además- Andreas Mikkelsen, el ex-Fórmula 1 Heikki Kovalainen y Daniel Chwist, mientras que con Citroën lo hacen el irlandés Eamonn Boland y el local Satoshi Imai y con Ford Grégoire Munster. Toshihiro Arai larga con un Subaru Impreza S4 de homologación nacional, su hijo Hiroki con un Pegeot 208 Rally 4 y Norihiko Katsuta, padre de Takamoto, con el que sería el estreno (aunque no homologado todavía) del Toyota GR Yaris Rally2.

Lo que hay que saber

El año pasado, fue un fabricante coreano y no uno local el que festejó en lo más alto del podio. Hyundai le aguó la fiesta a Toyota en estos caminos montañosos cuando Neuville y Tänak consiguieron el 1-2 para esta escuadra en el retorno al país por primera vez en una docena de años.

Elfyn Evans había sido líder con su Toyota, pero perdió tiempo al detenerse a cambiar una rueda pinchada. Katsuta subió a un emotivo podio al ser tercero ante su gente.

Apenas en la PE2, a Sordo se le prendió fuego el i20, que quedó irrecuperable.

Grégoire Munster se alzó con su primer triunfo en WRC2, también a los mandos de un Hyundai.

Las tripulaciones se enfrentarán a 22 tramos especiales y un total de 304,66 kilómetros alrededor de Aichi y Gifu. El viernes es el día más largo con parciales (133,26 km), incluyendo el sector que pasa por el largo túnel Isegami, seguido por el más veloz Inabu Dam (19,38 km) y por Shitara Town (22,53 km), que se repiten.

El sábado comienza con Nukata Forest (20,32 km) y continúa con Lago Mikawako (14,78) y Okazaki City (2,84), ésta última con montaje de neumáticos al mediodía. La jornada concluye con Shinshiro City (6,70), donde se registra el promedio más alto.

La tercera etapa se divide en seis tramos sin posibilidad de asistencia. Ena City (22,92 km), Nenoue Kougen (11,60 km) y Asahi Kougen (7,52 km) se usan dos veces para dar forma a un recorrido que abarca 958,95 km.

El lugar

Japón se encuentra en Asia Oriental. Limita con el mar del Japón al oeste y se extiende desde el mar de Ojotsk en el norte hasta el mar de la China Oriental y Taiwán en el sur. Su territorio comprende un archipiélago de 6.852 islas que cubren 377.975 km² sobre el denominado anillo de fuego del Pacífico. Las cinco principales son, de norte a sur, Hokkaidō, Honshū, Shikoku, Kyūshū y Okinawa. Tokio es su capital y ciudad más grande de Japón, aunque hay otras de gran porte, como Yokohama, Osaka, Nagoya, Sapporo, Fukuoka, Kobe y Kioto.

Con 123.720.000 de habitantes, este es el undécimo país más poblado del mundo, así como uno de los más densamente urbanizados. Aproximadamente, tres cuartas partes del terreno son montañosas, con algunas estrechas llanuras costeras. Su mapa se compone de 47 prefecturas administrativas y ocho regiones tradicionales. Viven en Tokio 37.000.000 de ellos.

Se estima que hay rastros de civilización desde el Paleolítico superior (30 000 a. C.). Entre los siglos IV y IX, los reinos de Japón se unificaron bajo un emperador y su corte imperial con sede en Heian-kyō. Sin embargo, a partir del siglo XII, el poder político estaba en manos de una serie de dictadores militares (shōgun) y señores feudales (daimyō), impuesto por por una clase de nobleza guerrera (samurais).

En 1854, una flota de los Estados Unidos obligó a Japón a abrir el comercio con Occidente, lo que provocó el fin del shogunato y la restauración del poder imperial en 1868. Luego, el imperio nipón adoptó una constitución de estilo occidental y prosiguió un programa de industrialización y modernización. En 1937, Japón invadió China y cuatro años después entró en la Segunda Guerra Mundial como potencia del Eje. Después de sufrir la derrota en todas las áreas afectadas por el conflicto en el Pacífico y dos bombardeos atómicos, Japón se rindió en 1945 y quedó bajo una ocupación aliada de siete años, en la que adoptó otra nueva constitución.

Desde 1947, mantiene una monarquía constitucional parlamentaria unitaria con una legislatura bicameral. Como nación, se trata de una de las mayores potencias, miembro de numerosas organizaciones internacionales, incluidas las Naciones Unidas (desde 1956), la OCDE y el G7. Es el cuarto ejército más poderoso del mundo.

A poco de la Segunda Guerra Mundial, Japón experimentó un alto crecimiento económico, convirtiéndose ya en 1972 en la segunda economía más grande del planeta, antes de ser superado por China e India en 2010. Es líder en las industrias automotriz y electrónica con múltiples marcas conocidas y ha realizado importantes contribuciones a la ciencia y la tecnología. Posee la esperanza de vida más alta del mundo, aunque está experimentando una disminución de su población. La cultura japonesa es bien conocida en todos lados por su arte, cocina, música y costumbres populares.

Sus principales exportaciones son equipos de transporte, vehículos motorizados, productos de hierro y acero, semiconductores y componentes de automóviles.

Desde el punto de vista del deporte motor, los japoneses se han enorgullecido de sus muchos equipos oficiales con todas las marcas nacionales en una diversidad muy completa de especialidades de cuatro y dos ruedas. En el Rally mundial, Kenjiro Shinozuka es el único vencedor en la historia, con triunfos consecutivos en las ediciones 1991 y 1992 en Costa del Marfil con Mitsubishi Galant VR-4. Shinozuka también se impuso en la edición 1997 del Rally Dakar. Toshihiro Arai fue campeón del mundo de Grupo N en 2005 y 2007 con Subaru.