Antes de emprender rumbo a Concepción, varios equipos del campeonato Copec RallyMobil participaron ayer de una prueba comunitaria en Quillón.

Muy al estilo de lo vivido en los días previos al Rally de Los Ángeles, algunos participantes de la clase RC2 aprovecharon la jornada para compartir experiencias junto al piloto noruego Mads Østberg, invitado por segunda vez en el año a ser parte del equipo Joker junto a su navegante Patrik Barth.

A diferencia de aquella vez, el ensayo no se limitó a usuarios de la marca Citroën, pues también se integraron a la iniciativa figuras como Martín Scuncio con José Luis Díaz sobre su Škoda Fabia (con una decoración fuera de la habitual) y Gerardo Rosselot con Marcelo Brizio sobre su Mitsubishi Mirage.

Østberg no solamente llevó en la butaca a sus colegas, sino que en esta oportunidad tomo coraje para ser él mismo acompañante de más de uno de ellos. También estuvieron en el tramo con medidas de seguridad especialmente acondicionadas Alberto Heller, Pedro Heller, Germán Lyon, Emilio Rosselot, y Tadeo Rosselot.

El campeón mundial WRC2 de hace dos años y flamante campeón húngaro comentó: “Fue un día bien aprovechado, del mismo modo que en la semana previa a Los Ángeles. El tramo que eligieron en Quillón fue de lo más divertido. ¡Me encantó! El C3 del Joker Rally Team anduvo de acuerdo a lo esperado y yo le hice varias pasadas al sector desde la mañana para conseguir una puesta a punto adecuada. El piso era distinto al que yo conocí de mi última vez en Chile, así que trabajamos un rato en perfeccionar esa configuración. Estoy muy contento con lo hecho porque me pareció entretenido compartir el momento con otros colegas. En este caso, hasta hice de copiloto por un rato, cosa que no es lo que más me agrada, ya que no soy yo quien tiene el control…De nuevo, he tratado de charlar con todos y aportarles mi experiencia con este C3. Ellos también se sentaron a mi lado en algunas vueltas. Cuando ellos se asustan un poco, esa sí es la parte en que yo me divierto…Accedí al pedido del equipo Rosselot de subirme al Mirage R5 como para brindar alguna impresión. De esta unidad, sabía que la hizo un preparador sueco y hasta la había correr. Ahora, tenemos por delante el Rally del Biobío con un esquema bastante parecido a lo que conocimos acá en 2019 durante la fecha mundial, con tramos que ya se transitaron y otros muy similares. Será un fin de semana largo y con calor, lo cual representará una exigencia extra para nosotros y para el medio mecánico”.

Fotos: Luis Barra