Después de las torrenciales e incesantes lluvias que se abatieron sobre Grecia toda la semana, que convirtieron a los reconocimiento del Rally Acrópolis en un pandemonio de barro, la décima fecha del Campeonato del Mundo de la especialidad en Grecia se viene desarrollando normalmente, con pisos a veces húmedos y a veces secos, siendo la primera de esas condiciones un escenario poco habitual para esta competencia.
Con su Hyundai i20 N híbrido, Thierry Neuville mantuvo a raya a un Sébastien Ogier decidido a atacar al belga en todo momento sobre un Toyota GR Yaris, en la primera carrera del francés desde el mes de junio.
En medio de esa lucha, sólo 2.8 segundos los separan después de esta primera jornada de acción de la que es la 70ª edición del clásico helénico. A pesar de ganar apenas uno de los cinco exigentes tramos sobre tierra, Neuville se mantuvo en todo momento como líder de la clasificación general.
Anoche, en el superespecial de Atenas, se había impuesto Kalle Rovanperä por 7.4s sobre su compañero ocho veces campeón, pero hoy se dedicó a intentar que los punteros no se le escapen tanto mientras esquivaba piedras al abrir la ruta. Así, el finés llegó al parque cerrado tercero a 25.5s del Hyundai que manda en los resultados.
El Hyundai que manda provisionalmente, entretanto, no siempre fue del todo efectivo, ya que un problema de transmisión que causó que en el último parcial patinara el diferencial trasero hizo peligrar el buen trabajo de su tripulación e impedía que se pudiera acelerar a fondo en primera, segunda o tercera velocidad.
A Ogier, unas ramas de árbol le arrancaron el alerón trasero de su auto. Otro Toyota, el de Elfyn Evans, llegó a meros 5.5s de Rovanperä. El galés se esforzó hasta que un pinchazo en la PE2 le hizo perder tiempo y, al igual que otro de los coches japoneses, veía cómo se le desprendía al alerón más tarde.
Evans ascendió a cuarto tras superar por 1.1s a Esapekka Lappi (Hyundai) en Elatia. El escandinavo venía sufriendo una fuga de agua en su motor. Daniel Sordo cayó de quinto a séptimo en los últimos kilómetros, aunque lo del español fue menos grave que el percance vivido por Ott Tänak, que reparó una falla técnica en su Ford Puma en la zona de montaje de neumáticos, lo cual le supuso una penalización de 3m40s. Se supo luego que el inconveniente era similar al que provocó el abandono de su compañero Pierre-Louis Loubet, relacionado a una brusca suba de temperatura. El estonio, pese a todo, fue el más rápido en dos ocasiones.
Octavo absoluto es el mejor coche WRC2, el Škoda Fabia RS de Nikolay Gryazin, que no suma puntos en este rally. Por ende, Yohan Rossel marcha adelante en dicha clase WRC2 con un Citroën C3 Rally2. Recién en la parte final de la jornada, el volante galo se vio en esa posición que antes ocupaba su compatriota Adrien Fourmaux con un Fiesta de M-Sport. El médico del Ford no pudo evitar la obligación de parar a cambiar la rueda delantera izquierda, completamente rota. Hasta entonces, Fourmaux llevaba 8s de ventaja. Era el penúltimo compromiso a afrontar y su margen se había reducido a 0.9s, todo eso como paso previo a más infortunios, concretamente un segundo pinchazo consecutivo a poca distancia de esa zona.
Con ello, Rossel situó al Citroën rojo 6.8s por delante del Škoda Toksport de Gus Greensmith. Andreas Mikkelsen fue víctima de varias gomas pinchadas y Oliver Solberg padeció anomalías con la presión de combustible.
El boliviano Marco Bulacia y el finlandés Sami Pajari, también ellos con la marca checa, se mantuvieron tercero y cuarto, respectivamente. Robert Virves fue quinto con un Fiesta, precediendo al polaco Kajetan Kajetanowicz (Škoda).
En WRC3, Diego Domínguez (h) contuvo el aliento para ser quien encabeza esa división tras una dura puja con Laurent Pellier. El joven paraguayo necesita imperiosamente de la victoria en Grecia para poder llegar al Rally Chile Biobío al menos empatado con Roope Korhonen (que ha sumado 100 puntos en sus cuatro eventos).
Durante largo rato, fue impresionante la paridad en los tiempos del sudamericano y el francés. Domínguez prevaleció en la mañana (cuando se canceló el tercer tramo por mala ubicación del público) y su adversario por la tarde. Lo cierto es que entre estos dos Ford Fiesta Rally3 se produjo un increíble empate, que deberán dirimir desde mañana. 1min 53.5s es lo que le llevan a Tom Rensonnet, de Bélgica.
El irlandés William Creighton llegó a la mitad de la etapa con daños en el radiador. Ali Turkan no pudo reanudar la prueba por problemas de motor. Eamonn Kelly y Hamza Anwar pelean por la cuarta plaza y el peruano Eduardo Castro es sexto en su primera salida mundial con este vehículo, que también usará en la Región del Biobío.
A Creighton se le diluyeron las esperanzas de poder festejar en el Rally Acrópolis el título Junior, ya que esta es la última cita de ese torneo, excepcionalmente con puntaje doble y unidades extra por victorias de tramo. Él y su copiloto Liam Regan empujaron la máquina tres hasta el área de montaje de neumáticos para improvisar reparaciones.
La segunda etapa es de 141 kilómetros y medio a través de seis sectores cronometrados, los de Pavliani, Karoutes y Eleftherochori, que se repiten.