Thierry Neuville pasó al frente del Rally de Acrópolis en Grecia durante la segunda etapa en un avance que refuerza sus posibilidades de ser por primera vez campeón mundial de esta especialidad.

El belga largó tercero, pero fue escalando posiciones con buen ritmo mientras sus compañeros de equipo en Hyundai Motorsport, Ott Tänak y Daniel Sordo, se vieron afectados por los rigores propios de esta carrera.

De hecho, era el estonio quien se había adjudicado la jornada anterior, pero hoy el estonio tuvo que parar a cambiar ruedas pinchadas dos veces en apenas diez kilómetros, perdiendo no solamente los 21 segundos de ventaja que tenía, sino cuatro minutos que lo relegaron al cuarto lugar.

Sordo heredó brevemente el liderato en ese momento, aunque al poco rato fue otro de los perjudicados por las piedras filosas sueltas, que castigaron su i20 N con un golpe en el neumático trasero derecho que terminó de desintegrar el guardabarros de ese lado, además de causarle un retraso de casi 50s.

A la vez que Neuville analizaba lo que sucedía con sus colegas y era precavido con las gomas para imponerse por 54.9s con respecto a su compañero español, Sébastien Ogier fue el más rápido en tres de estos seis tramos y se mantuvo tercero con el mejor Toyota GR Yaris, a 1m19.9s.

Elfyn Evans (Toyota) volcó en la PE11 y se retiró. Dos tramos antes, se había accidentado, sin consecuencias, Grégoire Munster sobre su Ford Puma.

En consecuencia, el resto de los primeros puestos fueron ocupados por participantes de la clase WRC2, donde el nuevo líder es Sami Pajari, quien con su GR Yaris superó al Škoda de Robert Virves. Ambos habían empezado la mañana con 1.5s de diferencia, que ahora se estiró a 27.7s.

Pajari fue contundente en Aghii Theodori (PE10), donde el piso era algo más blando y benévolo. En la segunda pasada por allí, Virves pinchó un neumático y quedó lejos de su rival.

Yohan Rossel protagonizó una impresionante remontada al volante de su Citroën C3 y trepó a la tercera colocación después de imponerse cuatro veces. Kajetan Kajetanowicz (Škoda) fue cuarto y Georg Linnamäe (Toyota) le arrebató el cuarto puesto a Fabrizio Zaldívar (Škoda) cuando el paraguayo paró a cambiar una rueda en el undécimo parcial.

Nikolay Gryazin tuvo un final abrupto al romperse el eje de transmisión de su C3 en la PE10.

El actual campeón europeo Junior, Norbert Maior, va primero en WRC3 con un Ford Fiesta Rally3 y un margen a su favor de 2m06.2s con respecto a Romet Jürgenson.

Hizo más de 30º por la tarde, un factor que sumó a la exigencia de los caminos y a la cantidad de pinchazos que la mayoría padeció.

Maior le cedió la punta fugazmente al estonio hasta que éste se detuvo a cambiar una goma pinchada. Pese a haber perdido unos tres minutos, los demás competidores no pudieron alcanzar a Jürgenson, pues el tercero, Petr Borodin, quedó a 1m40.8s.

Ali Türkkan desertó en el enlace hacia la última especial con la suspensión trasera muy deteriorada. Taylor Gill tampoco pudo sacar provecho de los contratiempos ajenos, pues corrió con un brazo de dirección torcido y una pérdida en tiempo de casi 16m con respecto a su principal adversario.

Entre los sudamericanos, el peruano José Caparó se recuperó bastante y es sexto, o sea dos posiciones más arriba que el boliviano Nataniel Bruun. Diego Domínguez (h), de Paraguay, va undécimo y el limeño André Martínez 13º.

El rally concluye mañana con tres pruebas cronometradas que cubren 54,05 km.