Thierry Neuville y Martijn Wydaeghe pasaron hoy a la punta del Rally de Montecarlo. Los belgas van adelante con un Hyundai i20 N híbrido, pero tienen a sus espaldas al Toyota GR Yaris de Sébastien Ogier y Vincent Landais, que han prometido atacar.
Neuville destronó del primer lugar al francés en el último tramo del día, el 14. Su jornada había empezado con fuerza en la mañana, cuando pasó de tercero a segundo, también al superar al ocho veces campeón en una superficie que presentaba parches de hielo sobre el asfalto.
El líder anterior hasta ayer, Elfyn Evans, fue perdiendo tiempo y siendo superado por sus dos perseguidores hasta que llegó tercero al parque cerrado, a 34.9s.
Ogier, entretanto, ganó dos tramos consecutivos (uno de los cuales se transformó en la prueba especial número 700 en la que ha sido el más veloz, pasando las 699 de Juha Kankkunen) y se encaramó a la primera posición, pero poco más tarde su contrincante de Hyundai fue rotundo en los últimos kilómetros y cerró la tarde con una ventaja a su favor de 3.3s, que presagia una definición más que interesante para esta 92ª edición del clásico monegasco.
Desde ahora, las etapas de domingo ofrecen la oportunidad de sumar hasta siete unidades extra, además de las otra cinco que da el Power Stage que pone fin a cada competencia.
Evans completó el décimo tramo sin propulsión híbrida, aunque tampoco pudo igualar los parciales de quienes quedaron delante de él cuando los mecánicos le solucionaron ese problema en la asistencia.
Ott Tänak (Hyundai) se afianzó en la cuarta posición y tomó distancia del Ford Puma de Adrien Fourmaux, especialmente al haberse impuesto en el sector entre Pellafol y Agnières-en-Dévoluy. En el equipo M-Sport, hubo una baja, la de Grégoire Munster, que abandonó por salida de camino en la PE12.
Ese incidente le permitió a Andreas Mikkelsen ascender a sexto general con el tercer i20 N Rally1 y a Takamoto Katsuta (Toyota) hacer lo propio con el séptimo puesto.
Octavo absoluto es el mejor auto de la clase WRC2, el Citroën C3 de Nikolay Gryazin, a quien le costó un esfuerzo considerable seguir al tope de la clasificación, puesto que el Škoda Fabia RS del madrileño José María López se le ha acercado tanto como a dos décimas.
En esta división, la puja por el triunfo será incluso más intensa, ya que Yohan Rossel también (Citroën) se sumó hoy al trío que pugna por ella con muy buen ritmo. El francés está a 6.7s de Gryazin.
La batalla entre López y el ruso (ambos con cambios de marca con respecto a 2023) fue interminable y varias veces casi empataban sus registros, acosados de cerca por el otro C3. La mayor diferencia se dio en la segunda pasada por Esparron-Oze, donde el español de 28 años le hizo 10.8s a su principal oponente al mismo que tiempo que Rossel no le daba tregua al imponerse en tres pruebas especiales.
Algo más apartado de esa contienda, es cuarto Nicolas Ciamin con un Hyundai i20 N y quinto Stéphane Lefebvre con el mejor de los nuevos Toyota GR Yaris Rally2, escoltado por otro coche igual, el de Jan Solans.
Oliver Solberg tuvo que retirarse al quedar su Škoda sin rueda de auxilio, producto de los dos pinchazos consecutivos en las PE9 y 10.
Al volante de un Ford Fiesta Rally3, Jan Černy amplió su ventaja en WRC3 con relación al corso Ghjuvanni Rossi (Renault Clio), a quien ya le lleva más de ocho minutos.
El Rally de Montecarlo terminará mañana con tres tramos de velocidad más, que representan 52,12 km.
